Luego de casi 4 años de gestión y todos los indicadores sociales y económicos en picada, el Presidente pidió sacrificio a quienes están sufriendo a cambio de, una vez más, un supuesto venturoso «segundo semestre» que nunca termina de llegar.
En medio del aumento de la pobreza, el desempleo, el descontrol inflacionario, la caída del salario real y del poder adquisitivo de las jubilaciones, el presidente Mauricio Macri, al frente del «mejor equipo de los últimos 50 años» pidió a los argentinos aguantar.
«Lo que yo les pido es que tienen que aguantar, tenemos que tirar juntos de este carro» pidió Macri este miércoles en su intento por sostener su sueño reeleccionista.
La estrategia de campaña de Macri es sencilla y se basará en dos pilares: la polarización con la figura de Cristina Kirchner y el intento por instalar la idea de «es esto o el abismo kirchnerista» por un lado, al tiempo que se intentará instalar que los pésimos resultados obtenidos luego de 4 años de gestión son en realidad el germen de un venturoso futuro próximo a llegar.
Sin nada que mostrar en términos económicos o sociales, el gobierno de Macri pide sangre, sudor y lágrimas a cambio de la promesa, una vez más, de brotes verdes que nunca terminan de florecer.
Mientras Macri pide «aguantar» se multiplican los reclamos como el de Dante, aquel obrero de la construcción que lo dejó sin palabaras al reclamarle con un resonante «hagan algo» para darle respuesta a los millones de argentinos «que la están pasando mal».
